28 de octubre de 2007

El Bolsón: fantasías en madera

El bosque del cerro Piltriquitón es un museo de esculturas en honor a la tierra
El Bosque Tallado del cerro Piltriquitrón, cercano a la ciudad rionegrina de El Bolsón, es ahora un santuario natural donde la vegetación y el canto de las aves conviven con esculturas figurativas y abstractas. En 1978 el fuego arrasó con el bosque de lengas que había en ese lugar y convirtió a los árboles en troncos caídos, secos y ennegrecidos por el humo. Los otros incendios de la década, hubo varios, profundizaron esos daños.
La idea de construir este santuario, una ofrenda a la Madre Tierra herida por las llamas, germinó en la cabeza de Marcelo López, escultor nacido en Rosario pero patagónico y bolsonés por adopción, quien en 1997 participó del Segundo Encuentro Nacional de Escultores en General Roca.
Allí vio tallar enormes piedras de alabastro, de las cuales surgían formas y figuras, y supo que el desafío era convertir aquella tierra arrasada en una experiencia creadora, en darle una nueva vida a los árboles. Hubo, por supuesto, que realizar trámites burocráticos, pero finalmente se inició la metamorfosis de esas ocho hectáreas, a los 1.400 metros de altura, en el corazón del Piltriquitrón.
El objetivo del proyecto era realizar esculturas sobre los árboles secos, una obra faraónica que rápidamente fue visualizada como un atractivo turístico único de esa región, y tal vez del mundo.
Primero se eligió un espacio claro cercano al bosque seco y allí se instaló el campamento principal, donde se levantaron varias carpas, y al que se dotó de generadores eléctricos.
Después hubo que organizar las comidas para 30 personas y contar con un lugar para los equipos de los artistas, artífices de lo que llamaron “la gran transformación”.
Los traslados, que fueron muchos, se realizaron a lomo de caballos cargueros. Y en otros dos encuentros, los de 1998 y 1999, los escultores convocados por López tallaron 31 esculturas sobre los árboles secos, que son las que se exhiben. “En diciembre de este año, del 7 al 16, cuando realicemos el Cuarto Encuentro Nacional de Escultores, habrá ocho monumentos más”, informó López, quién confirmó que “este año por primera vez vendrán dos escultores extranjeros, uno de Colombia y otro de Perú”.
Las destacadas
Entre las esculturas se destacan “Fuerzas contrapuestas”, del bolsonés Hugo Vázquez; “Puma Indio”, del chubutense Eduardo Luso; “Plantador para Duendes”, del tucumano Guillermo Rodriguéz, y “El Guardián del Sol”. De esta última, su autor, Marcelo López, dice: “siempre trato de rescatar diseños nativos de mapuches, tehuelches, araucanos; esta es una escultura de madera de lenga de dos metros de alto que representa a un personaje poderoso”.
El Bosque Tallado está a 11 kilómetros del El Bolsón, por un camino de montaña que atraviesa bosques nativos. En la época invernal, a
pesar de la nieve, se puede visitar gratuitamente, y en verano se cobra un bono que se destina a mantener el lugar y solventar los gastos de dos guías de sitio.